El Madrid remonta 16 puntos y es líder; Ayón, con 4 puntos
Los blancos firmaron uno de los peores partidos del curso, pero salvaron la papeleta ante el Joventut con 21 puntos en los últimos seis minutos. Reyes fue clave en la victoria.
El Madrid hizo tantas cosas mal que sorprende que ganara, pero ganó. Y lo hizo tras remontar 16 puntos (49-33, minuto 22). Salvó la papeleta en el repecho que enfilaba la meta, en unos últimos seis minutos en los que anotó 21 tantos cuando hasta entonces apenas llevaba 60. Felipe Reyes había sido el mejor y lo ratificó en los 200 segundos finales. Orgullo de capitán. Seis puntos decisivos en su regreso a la pista junto a Llull para completar la remontada.
Los blancos se ponían otra vez por delante más de tres cuartos después. Desde el 8-9 inicial. Fallar un lanzamiento exterior (Rudy, 2 de 9) y atrapar el rebote de ataque había sido su mejor jugada durante gran parte del choque. Ahí Hunter echó una mano, y hasta dos, y mantuvo al Real con opciones. Luego llegarían un par de acciones de Carroll y varias de Randolph. El pívot estuvo muy centrado en el desenlace con robos de balón vitales y canastas de peso. Doncic transmitió serenidad y el oficio del bloque hizo el resto.
En realidad, los de Laso reaccionaron cuando dejaron a un lado la línea de tres (6 de 25, aunque Carroll mejoró algo: 3 de 8) y empezaron a sumar más cerca del aro y a forzar faltas. Se olvidaron de remontar a la heroica y se abrazaron a la constancia. Una templanza que le faltó al Divina Seguros Joventut para agarrar una victoria que tocó con los dedos durante treinta minutos. Vidal y Bogdanovic fallaron un triple cada uno para forzar la prórroga tras acertar Llull desde cinco metros a diez segundos de la bocina.
El parcial de 0-12 del Madrid le había cortado las alas a la Penya. Del 74-65, a falta de 4:15, al 74-77 a 1:28. Se bloqueó y tiró por la borda una actuación modélica. Una ocasión de oro. Diego Ocampo utilizó todas sus piezas con criterio y encontró muchos brazos capaces de mover la nave: los de Jordan al principio y al final, los de Bogdanovic y Vidal, los de Abalde, Ventura… Mejor circulación de balón y más amenaza exterior que el rival, también más nervio y más pulso, aunque las 19 pérdidas y los 12 rebotes defensivos cedidos acabaron por crispar a los verdinegros. La puntería les abandonó cuando solo quedaba rematar. Por cierto, poco hubo de Gustavo Ayón: sólo aportó 4 puntos y apenas tuvo incidencia en 19 minutos sobre la duela.
Cayó el Barça y el Madrid acaba líder en solitario la primera vuelta. Jugará los cuartos de final de la Copa del Rey el jueves 16 de febrero y si avanza tendrá así un día más de descanso.