Nadal aún no pierde la fe: "Puedo competir por cosas importantes"

Andy Murray y Rafa Nadal pararon el tráfico en Abu Dhabi, en la autopista que da acceso al skyline de rascacielos del emirato, para anunciar que el tenis vuelve. Antes de cerrarse 2016, el número uno y el actual número nueve inician el nuevo curso en la ya clásica exhibición Mubadala, que reparte 250.000 dólares en premios (además de suculentos fijos, claro) para adelantarse al inicio de temporada en torneos oficiales de la ATP donde ya se pondrán en juego puntos: Brisbane, Doha y Chennai.

Nadal, situado ahora en el puesto noveno del ránking, no juega un partido individual desde hace dos meses y medio, cuando decidió parar en Shanghai para recuperar del todo su muñeca izquierda, que forzó hasta provocar un edema para estar en los Juegos. Este jueves se medirá a Tomas Berdych (16:00, TDP), décimo de la ATP, con la pretensión “de jugar partidos duros y coger ritmo”, según advirtió en Abu Dhabi.

De ganar al checo le esperaría el canadiense Milos Raonic (actual número tres), y posiblemente Andy Murray en la final. Exigencia máxima de primeras para comenzar a adivinar dónde puede estar Nadal, el campeón de 14 grandes que detuvo su cuenta en Roland Garros 2014 y encadena dos temporadas, 2015 y 2016, con tres y dos títulos, respectivamente. La pátina de invencible en el vestuario se ha ido diluyendo a la par que lesiones y ansiedad le restaron regularidad y con ello confianza.

“Al 2017 le pido salud”, dijo Nadal antes de salir de Manacor, donde ha realizado la pretemporada en su academia. Nada más. Que el cuerpo le respete porque en su interior el fuego no se ha apagado. “Me siento sano y eso es lo importante”, dijo ayer. “Mi idea es estar aquí (en el circuito) unos años más y siento la motivación suficiente para seguir. Creo que puedo competir por cosas importantes en los próximos tres años”, reveló poniendo un plazo temporal a cuánto tiempo más se ve en el altísimo nivel ahora que ha llegado a los 30 años.

Con la rodillas en orden, la muñeca curada y la incorporación de Carlos Moyá a su equipo técnico, con el que ya ha estado trabajando en Manacor, Nadal buscará de nuevo resucitar, como cuando en 2013 alzó diez torneos después de una grave lesión de rodilla. Si hay alguien experto en tumbar predicciones es él.

“He podido trabajar cosas que no eran posibles los dos años anteriores porque las rodillas no me lo permitían”, confesó un Nadal que, además, ha puesto más esmero en cuidar la alimentación y sacar provecho del descanso. Pequeños factores para sumar y volver a un escenario en el que ha ido perdiendo protagonismo a la par que Federer (35 años, 16º). Por vez primera desde que los dos ex números uno coinciden en el circuito, no se midieron en 2016. Djokovic protagonizó la primera mitad del año y el sprint final de Murray le aupó a la cima mientras que Raonic, Nishikori o Thiem ganaron protagonismo. El que quiere recuperar Nadal.