Villar se acerca al ahora CSD y sugerirá a su Junta el 21 de diciembre pedir la excepción
No irá a los tribunales, como amenazó, para convocar ya elecciones. Villar cambiará su plan al salir Cardenal, como quería, y entrar Lete.
El pasado 11 de octubre, en la última Asamblea General de la Federación, Villar se plantó ante Miguel Cardenal porque el CSD no le aprobaba su reglamento electoral por enésima vez para poder convocar las elecciones en el año olímpico. Ese día, además de destituir a su secretario general y precandidato, Jorge Pérez, amenazó públicamente al Consejo con llevar el caso al tribunal contencioso-administrativo ya que el TAD había perdido buena parte de su credibilidad. De hecho, la FEF presentó una alegación formal mediante un recurso de reposición. Sin embargo, con la llegada de José Ramón Lete a la presidencia del CSD sustituyendo a Cardenal, Villar ha cambiado por completo su estrategia. Ha pasado de la guerra al deshielo.
La Comisión Directiva del CSD aún no se ha pronunciado sobre ese recurso de reposición presentado por la FEF pero, según ha podido saber AS, se reunirá por primera vez con la nueva cúpula directiva en breve. Seguramente la próxima semana. Y ahí, con casi toda seguridad, rechazará la alegación. Por este motivo, Villar ha convocado a su Junta en Las Rozas el próximo 21 de diciembre para coordinar el nuevo plan a seguir a partir de esta nueva notificación. Y la idea de Villar, según varios presidentes de Territoriales y miembros de ese órgano colegiado consultados, pasa por enterrar definitivamente el hacha de guerra y negociar.
La alternativa más viable de Villar, y la que respalda una mayoría, es olvidar la vía judicial y pedir un excepción al régimen general como han hecho otras federaciones (ciclismo), con el objetivo de poder convocar las elecciones cuanto antes (ya se pusieron dos fechas, 22 de abril y 20 de diciembre, y no se pudieron llevar a cabo). Modificar el último reglamento presentado, en sus puntos de representatividad y distribución de la Asamblea, sería dar la razón a Cardenal y quedar en evidencia. Mientras que insistir a Lete con que la FEF lleva razón sería tensar de nuevo la cuerda, ya que la Orden Ministerial que Villar se ha saltado no está firmada por el anterior secretario de Estado, sino por el mismísimo ministro que aún se mantiene en su cargo.