11 famosas cábalas en el deporte
Con la llegada de La Volpe, sus dragones, su “bruja” asesora, supersticiones y esa marcada inclinación a buscar la “buena suerte”, recordamos otras cábalas. Puerto Rico vs Dominicana en vivo y en directo: Serie del Caribe
Con la llegada de Ricardo Antonio La Volpe, sus dragones, su “bruja” asesora, supersticiones y esa marcada inclinación a buscar la “buena suerte”, por lo que te presentamos las cábalas más llamativas del deporte.
11. Iván Zamorano
El delantero chileno jugaba con una venda blanca en la muñeca derecha, pues una vez tuvo una molestia en esa zona y el día que le pusieron la protección metió tres goles. Incluso aquí en el América, donde consiguió el campeonato en mayo del 2002, siempre se le vio con su famosa venda.
10. Serena Williams
Vean cualquiera de su partidos y se darán cuenta que antes de su primer servicio, bota cinco veces la pelota, y para su segundo saque deja caer la bola en tres ocasiones.
9. Ray Lewis
El ya retirado linebacker de los Cuervos de Baltimore entraba al emparrillado siempre con el mismo baile, además arrancaba un poco de césped y se lo comía. Todo un ritual que lo marcó como un ídolo de la franquicia.
8. Lebron James
Antes de cada partido, James se pone el protector bucal y lanza el talco, que usa para las manos, al aire. En las finales, Lebron dejó de utilizar su teléfono celular y no se le ve postear nada en redes sociales.
7. El beso de la suerte
Durante el Mundial Francia 98, el ex defensor central Laurent Blanc siempre besaba la calva de su compañero, el arquero Fabien Barthez. Los galos conquistaron el Campeonato Mundial en aquella ocasión y la cábala se hizo mu famosa.
6. De tres en tres
Sam Bradford, quarterback de los Vikingos de Minesota, tiene el hábito de dividir su plato de comida en tres. ¿Cómo? Cualquier cosa que come lo hace en series de tres. Por ejemplo: Tres trozos de manzana, una porción de arroz dividida en tres o tres rebanadas de pan.
5. El número impar
El máximo ganador de la Fórmula 1, Michael Schumacher, tenía una cábala relacionada con los números, únicamente competía con dígitos impares. A su llegada a Mercedes para la temporada 2010, exigió cambiar su número 4, con el 3 de su coequipero Nico Rosberg: “Ross sabe que prefiero correr con un número impar”, argumentó el SIETE veces campeón de la máxima categoría motor.
4. La cinta roja de JC
El afamado pugilista mexicano tomó como cábala usar una cinta roja amarrada en la cabeza, después de creer que le hacían brujería. Previo a la pelea contra Edwin Rosario, llegó a los oídos de ‘El César’ que la madre de su oponente lo estaba embrujando. Portó la banda en su cabeza para evitar maleficios y aquella noche salió victorioso. Desde entonteces, se volvió característica en él y en sus hijos e incluso llegó a lucir patrocinios en esta. El asunto de la brujería creció tanto que un día tiró algunas de las paredes de su casa, buscando ese “algo” que lo embrujaba.
3. Michael Jordan
El histórico jugador de la NBA no quiso desprenderse jamás de los shorts de Carolina del Norte que llevó el día de aquella primera gran conquista. Siempre se los calzó debajo de los de Chicago Bulls. Jordan también comía un pastel de manzanas antes de cada juego; incluso aquel día en el que supuestamente fue envenenado en Utah y salió a jugar con fiebre, anotando 38 puntos y colaborando a una remontada histórica en las finales de 1997.
2. El número 8
Roger Federer tiene una obsesión con el número 8 originada por su fecha de nacimiento, el ocho de agosto de 1981. Busca ligar ocho ‘aces’ durante su calentamiento previo, frota las manos con su toalla ocho veces al final de cada set, asegura cargar con ocho raquetas en su maleta al igual que ocho botellas de agua para su encuentro.
1. La sal de Matosas
Durante el partido de vuelta de la Final del Torneo Clausura 2014, el uruguayo Gustavo Matosas, entonces técnico del León, tiró un polvo blanco, presuntamente sal, sobre la cancha del Estadio Hidalgo, antes de enfrentar al Pachuca. La Fiera conquistó el título. Años más tarde, cuando el charrúa dirigió al América, aficionados Tuzos le lanzaron un par de puñados de sal cuando saltaba a la cancha en el Estadio Hidalgo. No ha podido volver a triunfar con un equipo desde entonces.