Vervoort: “Sin los papeles de la eutanasia, me habría suicidado”
La atleta belga compareció ante más de un centenar de periodista para aclarar que la decisión no la tomará inmediatamente después de concluir Río.
La atleta belga, Marieke Vervoort, compareció este domingo en la sala de prensa del centro acuático de Río para aclarar los pormenores de una noticia que ha dado la vuelta al mundo. Su deseo de someterse la eutanasia inmediatamente después de Río. Como ya adelantó a AS, la atleta belga, que ayer ganó la plata en la prueba de atletismo de los 400 metros, apareció muy sonriente. Más de un centenar de periodistas de todo el mundo estuvieron presentes. El jefe de prensa del comité belga reconoció que habían sido muchísimas las peticiones de entrevistas y, ante la imposibilidad de atender a todos, se celebraba la rueda de prensa.
Marieke reconoció que estos son sus últimos Juegos Paralímpicos, pero aclaró que todavía no ha llegado el momento. Feliz y sonriente, explicó que tener firmados los papeles para la eutanasia le da una sensación de tranquilidad: “Yo firmé los papeles en 2008, pero ya me ven, estoy aquí, gané la plata y estoy feliz de competir aquí en Río. Entrenar y competir son mis medicinas porque doy todo lo que tengo y dejo mis temores atrás. Después de los Juegos disfrutaré con mi familia y mis amigos y les daré toda la energía que me quede. Tener firmados los papeles de la eutanasia me da mucha paz y tranquilidad. Si no tuviera firmados mis papeles de la eutanasia ya me habría suicidado”.
La atleta belga, de 37 años, explicó que es muy difícil vivir con dolor, pero el hecho de saber que cuando no pueda más, podrá tomar su decisión: “Es muy difícil que te aprueben la eutanasia. Se necesita la firma de tres médicos que certifiquen que tienes una enfermedad progresiva incurable y que nunca habrá mejoría y luego un psiquiatra verifica que estás en plenitud de facultades”.
Explicó que tener los papeles de la eutanasia le está permitiendo atrasar la decisión y disfrutar con más tranquilidad del momento: “Si hace unos años me dicen que necesitaría asistencia externa tres veces al día, hubiera dicho que no quiero vivir más, pero aquí estoy, feliz y disfrutando de mi medalla.
Marieke explicó que sufre desde los 14 años una tetraplejia progresiva y que llegó un momento en que decidió no pensar en su enfermedad y vivir el día a día. “Hubo un momento en que dejé de investigar sobre mi enfermedad. El médico sólo me daba noticias malas y me di cuenta de que no vivía. Ahora intento disfrutar día a día. Quiero ser la inspiración para que la gente disfrute de los pequeños momentos de la vida. Quiero dar charlas de motivación. Quiero ser un ejemplo, que la gente piense: ‘Estoy aquí y voy a disfrutar’. Disfruto cada momento de la vida y después de un día malo, el bueno lo disfruto el doble. Si no tuviera mis papeles, probablemente ya me hubiera suicidado. Tenerlos me ha dado tranquilidad. Ya me ven, estoy aquí, contenta y pensando en mi última prueba en Río”.
Tras una hora de intenso relato, el jefe de prensa dio por terminada la rueda de prensa y Marieke posó, feliz y sonriente, con su medalla del plata, levantando el pulgar en señal de victoria y gritando: “Believe, you can. Yes, you can” (Cree, tú puedes. Sí, tú puedes”.