¡Que el frío no te detenga! Consejos para ejercitarte.
¡Que tus ganas de hacer ejercicio no se enfríen! Hacer ejercicio en invierno tiene muchísimos beneficios:
- · Te da una inyección de energía para levantar el ánimo en los días grises.
- · Activa tu sistema inmunológico para combatir resfriados.
- · Ayuda a quemar esas calorías extra que traen consigo las fiestas navideñas.
- · Te da una inyección de energía para levantar el ánimo en los días grises.
- · Activa tu sistema inmunológico para combatir resfriados.
- · Ayuda a quemar esas calorías extra que traen consigo las fiestas navideñas.
- · Vestirte en multicapas:
Aunque no lo parezca para mantenerte caliente no necesitas cubrirte con ropa gruesa y pesada. Es mucho más efectivo vestirte con 3 capas delgadas y pegadas al cuerpo. Aprovecha la tecnología de los nuevos textiles especiales para temperaturas extremas. Puedes empezar con una camiseta que absorba el sudor y te mantenga seco. Para aislar el frío continuar con una térmica y encima una chamarra impermeable para cortar el viento, frío o la lluvia o la nieve.
- · Vigila tus manos y cabeza:
Cuando el frío aumenta, tus manos y cabeza son las que más sufren pues la sangre se concentra en el centro de tu cuerpo y estas zonas disipan el calor. Usa guantes impermeables por fuera y relleno polar por dentro y cubre tu cabeza.
- · Tenis:
Revisa que tengan suela con tracción para evitar que te resbales en el agua en caso de que llueva o sobre otras superficies resbalosas.
- · Hidrátate:
Aunque parezca que no te da la misma sed, aún en el frío debes hidratarte cuando haces ejercicio. Así que no te olvides de tomar suficientes líquidos antes, durante y al final de tu entrenamiento.
- · Corre de cara al viento:
Empieza a correr de cara al viento y así evitar que te golpee de frente cuando estás regresando bañado en sudor y cansado. Es mejor enfrentarlo cuando estamos agarrando calor y aun no estamos tan húmedos.
- · En caso de síntomas de gripe o resfriado:
Es mejor prevenir que lamentar, lo mejor es que te quedes en casa y guardes reposo. Así evitas que esas molestias se compliquen y te recuperas más rápido para volver a entrenar.
Hay que reconocerlo, cumplir con la rutina diaria de entrenamiento en épocas de frío te exige muchas veces más fuerza de voluntad, y más compromiso con tus objetivos. Pero si no dejas de esforzarte y sigues estos consejos, pronto notarás que el ejercicio puede hacer que tu invierno sea más activo y divertido.
Demuestra que eres un deportista inquebrantable, capaz de ejercitarte aunque el día no ponga mucho de su parte. Te sentirás orgulloso de ti mismo.