Faitelson dispuesto a viajar a Honduras para limar asperezas

Llegó la hora de ver el debut de un nuevo Tri, ante viejos conocidos; rivales como El Salvador y Honduras, que mueven historias de pasión y polémica, como aquel duelo del Mundial del 70; de alegría y tristeza, después de tantas victorias del “Gigante” del área o de aztecazos; de miedos, por momentos trágicos, que incluyen la “guerra del futbol”, y hasta de odios, odios como los que carga sobre la espalda, David Faitelson, periodista y conductor deportivo, que habla para el Diario AS sobre el origen y posible solución de esta incómoda diferencia por la que incluso ya fue demandado.

¿Recuerdas de dónde sale ese "odio" que te tiene la gente en países como El Salvador y Honduras?

Yo creo que surgió a raíz de una crítica que hacía sobre el nivel de futbol en el área. Es un problema de percepción. Me ha costado mucho trabajo desde que llegue a ESPN. La forma que tenemos de comunicarnos en México, con futbol y la critica, es muy distinta a la de las naciones centroamericanas. Ahí la crítica no existe. La selección es vista como una imagen nacionalista y patriótica. No sé si es el reflejo de una carencia o la imposición de los gobernantes. La crítica a su selección es mal vista.

 ¿Luego entonces, sientes que la gente no sabe diferenciar entre una crítica deportiva y un insulto a la patria?

Totalmente. Ellos se confunden. La selección de un país representa al futbol de un país y no al país como tal. Yo no seré ni más ni mejor mexicano si gana la selección o si anota “Chicharito". Una selección puede representar dolor o alegría para el aficionado al futbol. FIFA le ha puesto los himnos por delante para "corromper" los sentimientos nacionalistas de los aficionados.

¿Pensarías en hacer una crítica favorable, sólo para que te quieran, como hacen otros comentaristas?

 No, no es mi función. El año pasado me demandaron en Honduras por discriminación racial. Increíble pero cierto. Manipularon un tweet mío donde me refería al nivel "bananero" de un México vs Honduras y dijeron que yo los había discriminado. Qué peligroso y qué triste. La pasión se confunde con el fanatismo y son pueblos que sustituyen sus carencias con la ilusión de ganar en el futbol.Ni hablar.

¿Estarías dispuesto a viajar a El Salvador o a Honduras para explicarles en algún foro, que eres un periodista y opinas lo que ves, pero que no desprecias a sus países?

 Sin problema. Creo que al final del día hay muchos aficionados al futbol que entienden la diferencia.Son pueblos hermanos, con una gran cultura, historia y una belleza geográfica mucho más imponente que su selección de futbol.Con gusto, volvería a viajar a cualquier país centroamericano.