Podio de justicia divina para Checo Pérez en el GP de Rusia
El mexicano terminó tercero con sólo Hamilton y Vettel por delante en una sensacional carrera en Rusia, a poco del GP de México
Se puso el gorro ruso y no podía dejar de sonreír. Poco antes estaba en la batalla. Total. Y terminó en el podio Checo Pérez. El mexicano, gracias a una sensacional estrategia de Force India después del segundo safety, demostró coraje y talento para mantenerse tercero a falta de dos vueltas para el final cuando tanto Bottas como Raikkonen llegaron a su altura y pudieron pasarle. Sergio llevaba los neumáticos ya muy dañados, pero como si desde México hubiesen hecho un embrujo y demostrando cierta justicia divina, en la última vuelta los dos finlandeses se tocaron y Checo logró un nuevo podio. Genial. Merecido podio del Checho. ¡Que viva México!
Más arriba, Lewis Hamilton, logró una nueva victoria, la novena de la temporada y está a punto de conseguir su tercer título mundial, el segundo de manera consecutiva. Esta vez tuvo la suerte de su lado. Y es que su compañero Nico Rosberg que partía desde la pole y salió bien sufrió problemas con su acelerador y tuvo que abandonar. Así las cosas Hamilton tiene que conseguir tres puntos más que su compañero en Estados Unidos y nueve más que Sebastian Vettel, para ser campeón. ¿Vettel? Sí, Vettel. Otra vez Vettel. Y es que esta temporada, más allá de la suerte de la avería de Nico, el alemán está demostrando que sus cuatro títulos de Red Bull pueden tener continuidad en Ferrari. Gran segundo puesto para el tetracampeón. Y fueron ellos dos los que, a partir de mitad de la carrera y después de dos coches de seguridad tuvieron cierta tranquilidad.
Pero más allá de Hamilton, Vettel y Pérez, la carrera tuvo otro héroe, aunque sin final feliz. Carlos Sainz, después de un terrible accidente que le puso costar la vida el día anterior, salió a pista y demostró un coraje y un talento increíble, llegó a estar séptimo y peleando por todo cuando su coche comenzó a tener problemas de freno, hizo un trompo, perdió el alerón trasero y tuvo que abandonar. Estaba en los puntos y muy por delante de su compañero Verstappen, que se toco en la salida con otros coches en el primer safety car. El segundo llegó mediada la carrera por un choque de Grosjean sin consecuencias para el francés. Fue uno de los siete abandonos de la carrera, una cita rusa que tuvo de todo, coches de seguridad, choques, adelantamientos y… otra victoria de Hamilton.
Mientras, el que fuera su enemigo íntimo protagonizó una escena curiosa. Estaba Vladímir Vladímirovich Putin mirando hacia la pista y a los monitores de su palco del circuito de Sochi. A su lado Bernie Ecclestone y en un momento dado mientras Fernando Alonso pasaba duodécimo por la línea de meta los dos mandatarios hablaban, quizá el inglés intentaba explicar al ruso como uno de los pilotos más grandes de siempre rodaba en las últimas posiciones. ¿Qué clase de deporte es este?, debió pensar el presidente de Rusia. Casi al mismo tiempo, el piloto español recibía un mensaje por radio de su ingeniero de pista Mark Temple. “Fernando, vas a luchar con Massa hasta final de carrera”. El brasileño con su Williams de motor Mercedes y casi veinte kilómetros por hora de velocidad punta más que el McLaren Honda estaba justo detrás del asturiano. “Me encanta vuestro sentido del humor”, replicó Fernando. Antes de la carrera había posado junto a sus mecánicos con una bandana japonesa en la frente como recuerdo de sus 250 grandes premios, cifra mágica para un bicampeón que quiere volver a celebrar lo que es no lo que fue o ha sido. Finalmente terminó décimo, justo en los puntos y por detrás de su compañero Jenson Button que concluyó noveno. Los dos McLaren en la zona de puntos en una carrera con siete abandonos. Por eso. Y solo por eso. Pero con Alonso hundido, hay sustituto de sangre latina. Checo Perez reina en la F-1 a poco de la cita del año, el GP de México donde opta a todo y sueña con una victoria ¿imposible?