América ya "ganó"
En el ambiente se percibe esa clásica seguridad y confianza en exceso, de parte de los seguidores americanistas, previo al encuentro de este sábado, en casa del Cruz Azul.
No importa que las estadísticas reflejen una clara ventaja de los cementeros en casa, donde acumulan seis juegos sin perder ante los cremas; tampoco recuerdan que hace unas semanas odiaban a Ricardo Peláez por haber contratado a Ignacio Ambriz y que cuando arrancó el torneo ya se veían como el fracaso del año, después de ser goleados por Puebla y Atlas; bueno, ni siquiera ven que la historia de La Máquina nos marca una clara tendencia a pelear como equipo grande en estos partidos "importantes", aunque luego vuelvan a las andadas, controlados a distancia por su promotor de "confianza".
No, nada importa cuando el corazón se ha entregado plenamente. Hoy el americanismo se olvida de todo y se dispone a cobrar las apuestas y el silbatazo aún no ha sonado en el Estadio Azul.
Pero así es el fútbol y no sólo en México, en todo el mundo; un día todo es felicidad, sonrisas, bromas y gran ambiente, pero pueden bastar un par de semanas para que los mismos aficionados piden de nuevo la cabeza del técnico, al que "nunca le tuvieron confianza".
Yo lo único que pido es que no sea uno de esos cero a cero que logran que mi sábado familiar se vea interrumpido por una siesta que no me gusta tomar en mi único día de descanso.