El Atlas encuentra consuelo a costa de un Puebla valiente
Loboa y Medina encaminaron una victoria vital para el Atlas, que sufrió en demasía para vencer a un Puebla que estuvo cerca de empatar el encuentro en el último segundo.
El Atlas derrotó 2-1 al Puebla y palió la crisis que encaraba después de las dos derrotas consecutivas, con ocho goles recibidos y ninguno anotado. Los goles rojinegros fueron obra de Eisner Loboa, al 10', y de Juan Carlos Medina, 13 minutos después, al hacer válida una pena máxima. Por los poblanos descontó Matías Alustiza, también de penal, al 85'. Sobre la recta final, Isaac Díaz marró una opción muy clara bajo el arco. El Atlas sufrió, pero finalmente alcanzó los tres puntos.
El encuentro fue una quimera para los rojiblancos. El primer tiempo, no obstante, lo dominó a placer. Cuando los equipos apenas se asentaban en el campo de juego, Loboa esculpió un golazo: recibió la pelota escorado en la banda derecha, apenas traspasando el medio campo, recortó a Gutiérrez, pasó la pelota por debajo de las piernas de Robles y disparó raso para vencer la estirada muerde-polvo de Campestrini. El arquero argentino tendría otra intervención desafortunada: arrolló a Caballero y Guerrero dictó el penal. Juan Carlos Medina embocó el segundo desde el 'manchón'. El Puebla no tuvo reacción en lo que quedó del primer tiempo.
Los camoteros espabilaron en el segundo lapso. La rebeldía poblana dinamitó el partido. Vaivén sin respiro. Las ocasiones se sucedieron en catarata: doble atajada de Fraga a un tiro libre de Alustiza y un contrarremate de Flavio Santos, una chilena de Bergessio precedida de un disparo de muy lejos de Salinas. Ida y vuelta. El Puebla merecía un tanto y lo consiguió, gracias a un penal causado por una falta de Baloy sobre Díaz. Alustiza rompió el arco de Fraga y dio esperanzas a los poblanos. Faltaban cinco minutos. Y sobre el silbatazo final, Isaac Díaz rozó la hazaña, pero su remate con la punta del zapato se marchó por encima del arco dramáticamente. Muy valiente el Puebla; murió de pie.
El Atlas tomó aire y respiró aliviado. Después de dos goleadas en contra, sumó un triunfo vital para la credibilidad del proyecto Matosas. El Puebla perdió el invicto y aún tiene un partido pendiente contra el Monterrey.