Clubes mexicanos tienen maldición en finales de ida
Ningún equipo mexicano que han jugado una final de Copa Libertadores o Copa Sudamericana, ha podido ganar el juego de ida y sólo uno salió campeón
Los primeros 90 minutos de la Copa Libertadores terminaron con empate entre Tigres y River Plate, situación que deja con ventaja al cuadro argentino para la vuelta. El empate entre felinos y millonarios continúa con la tradición de los equipos mexicanos cada vez que juegan finales de Copa Libertadores o Copa Sudamericana.
En 2001 Cruz Azul disputó la primera final de Copa Libertadores para un equipo mexicano; el rival, Boca Juniors. Los cementeros no pudieron hacer valer su condición de local y cayeron por la mínima diferencia con los bosteros, quienes terminarían ganando la copa en su casa por penales.
En 2005 Pumas luchó por el título de la Copa Sudamericana con Boca Juniors. Nuevamente los xeneizes se llevaron de México un resultado positivo, pues empataron a un gol en Ciudad Universitaria. La vuelta, jugada en La Bombonera, terminó con empatete a uno y todo se definió a favor de los locales desde la vía de los once pasos.
En 2006 el Pachuca se instaló en la final de la Copa Sudamericana para enfrentar a Colo-Colo. Los Tuzos empataron el juego de ida y en la vuelta consiguieron la victoria por 2-1 en el Estadio Nacional de Santiago. Ahora pueden presumir de ser el único equipo mexicano en ganar un torneo continental.
En 2007, por tercer año consecutivo, un equipo mexicano llegó a la final de la Copa Sudamericana, tocó el turno de las Águilas del América. No les fue bien a los de Coapa y perdieron 3-2 el juego de ida. En la vuelta ganaron 2-1 en el Estadio Juan Domingo Perón, sin embargo, el criterio del gol de visitante apareció a favor de los argentinos.
En 2010 un equipo azteca volvía a llegar a la final de la Copa Libertadores, ahora fue el turno de Chivas, que jugó contra Internacional de Porto Alegre en el recién inaugurado Estadio Omnilfe. Los rojiblancos no pudieron hacer pesar su cancha y cayeron 2-1 con los cariocas. En la vuelta, los mexicanos no pudieron remontar, perdiendo la copa por marcador global de 5-3.