¿Quiénes necesitan de un milagro para ir al Mundial de Qatar?

México se medirá a Paraguay en partido amistoso este miércoles 31 de agosto en el Mercedes Benz Stadium de Atlanta, Georgia, con una plantilla conformada en un 100% por jugadores de la Liga MX. Por descarte y eliminación, la convocatoria del ‘Tata’ Martino tiene varios mensajes entrelíneas. Con el Mundial a menos de tres meses de distancia los pendientes deben apurarse. La utilidad del duelo ante la ‘Albirroja’ será solucionar las pocas dudas que pueda tener Martino para completar la lista de 26 elegidos que viajarán a Qatar.

Asumiendo que 20 lugares ya están seguros, que Acevedo aspira al puesto del ‘tercer’ portero, y que tanto Orbelín Pineda como Santi Giménez gozan de una buena posición por su estándar de ‘embajador europeo’, Martino deberá decidir entre Carlos Acevedo, Kevin Álvarez, Luis Romo, Luis Reyes, Fernando Beltrán, Sebastián Córdova, Luis Chávez, Rodolfo Pizarro y Henry Martin para llenar tres-cuatro cupos. Todos se juegan su pase al Mundial en 90 minutos. Quizá alguno tenga una nueva oportunidad en la fecha FIFA de septiembre (Colombia y Perú serán los rivales), pero para entonces se espera que el técnico argentino confeccione una lista idéntica o lo más cercana posible a la que anunciará a inicios de noviembre.

Por contra, quienes no aparecieron en la citación de agosto prácticamente pueden despedirse de la Copa del Mundo. Los casos más notorios son los de Alejandro Zendejas, Alfonso González, Alan Mozo, Juan Pablo Vigón, Aldo Rocha y Víctor Guzmán; algunos ya han portado la playera del ‘Tri’, otros, eternos ‘candidatos’. El tiempo ya no les alcanza para subirse a una convocatoria y convencer al cuerpo técnico de Martino salvo que alguna lesión, como la de ‘Tecatito’ Corona, abra alguna insospechada vacante. Ése sería su milagro, ya que ninguno ha sido de la predilección del ‘Tata’ a lo largo de sus casi cuatro años en el cargo. Y, en el caso de Zendejas, que se destrabe su situación y FIFA decida si el jugador ya cumplió con las condiciones para representar a México (cuenta con doble nacionalidad e, incluso, alineó con EEUU en el Mundial Sub 17 de 2015).

Otro que necesita de un rosario es Marcelo Flores. Martino contempla al futbolista del Real Oviedo como un proyecto a futuro, no como una pieza para el presente. Muy tajante ha sido al respecto: “Lo que más le sirve a Marcelo estar acá es para que conozca lo que es ser un seleccionado nacional, después tiene que construir carrera a nivel individual para ser considerado en el futuro, pero le sirve mucho para conocer lo que es ser seleccionado nacional”. Las palabras no son alentadoras si se pretende con ello buscar un asiento a Flores en el avión a Qatar, pese a que el juvenil ya eligió vestirse de verde, presumiblemente, con la condición de disputar la Copa del Mundo. No obstante, su rol como mediapunta puede obrar a su favor. No hay demasiados futbolistas con sus condiciones en el esquema de Martino. Dependerá de qué tan capaz sea de interpretar las intenciones del técnico en un sistema que va más de funciones que de posiciones fijas per se. Si aparece en la convocatoria de septiembre, sus esperanzas permanecen.

El caso Emilio Lara

La irrupción del joven zaguero del América es una bocanada de aire fresco. Disciplinado, carismático, con bien pie para sortear líneas, e impecable colocación, Lara es la nueva esperanza canterana de ‘Las Águilas’. Con solo 12 partidos como profesional, sus dotes han llamado la atención de aficionados y periodistas. Y, claro, su nombre ha sido colocado en la esfera de la Selección Mexicana. El problema, su lesión en la ingle izquierda sufrida ante Querétaro el pasado martes 23 de agosto. Su evolución luce favorable, en tanto la dolencia no parece ser grave; reportes apuntan a que, si bien no jugaría contra Mazatlán en la jornada 11 de Liga MX, su presencia con la Selección en Atlanta no estaría en riesgo. El tema, ahora, está las condiciones con las que podría presentarse al partido frente a los guaraníes. Lara estrenará convocatoria y, probablemente, minutos de juego como seleccionado nacional. El futuro inmediato depende de muchos factores. Pero su nombre ya revolotea.