Juan Carlos Vera resalta que el futbol mexicano perdió a una de sus grandes leyendas
Antonio “La Tota” Carbajal fue su entrenador en Morelia y terminó domando su duro carácter con su calidad en la cancha.
Para el chileno Juan Carlos Vera, este martes con el fallecimiento de Antonio “La Tota” Carbajal, el futbol mexicano perdió a una de sus grandes leyendas, sobre todo porque el mediocampista andino que llegó a Morelia para ser figura y que después en Pumas reafirmó sus condiciones, “El jugar un Mundial es lo máximo y él lo hizo en cinco, por favor, eso es algo histórico y fue el primero en lograrlo”, expuso.
Vera, desde su natal Chile, recordó viejas historias con Carbajal como estratega, pero primero destacó la trascendencia de La Tota en el futbol mexicano y a nivel mundial.
“Hoy el futbol mexicano pierde a una de sus grandes leyendas, el famoso Cinco Copas, porque Antonio era el único en el mundo que había jugado cinco Mundiales, jugar un Mundial es lo máximo y jugar cinco, es un premio, no cualquier jugador puede decir que jugó cinco mundiales y él lo hizo, fue el primero en el mundo y bien por la Tota”, destacó.
Vera también dijo que “Primero que nada es una noticia lamentable, una persona que realmente tuve la suerte de conocerlo, lamentable noticia, aprovechar para mandar un saludo a la familia, darles mi pésame y en lo personal se siente mucho, porque fue una persona que cuando llegas y lo conoces no fue fácil integrarse con él, porque tenía un carácter fuerte, era una persona que trataba de guiar al equipo, pero que no era de mucha seguridad, sino de estar pendiente los 90 minutos y siempre sacar lo mejor de uno”, expuso.
También dijo que “En lo personal, un entrenador que me dejó marcado, porque no fue fácil entrarle siendo extranjero, me lo fui ganando en la cancha y al final tuve una buena relación con él”, precisó.
¿Un entrenador que tenía sus ideas y que debiste ganártelo en la cancha?
Él no sabía mucho del futbol chileno, en esa época no era fácil tener videos de los jugadores, porque todo se manejaba por las portadas de las revistas, por las notas de los periodistas, eso era lo que se tenía que ocupar para saber que clase de jugador eras. Entonces para él y para todos los entrenadores en México era complicado contratar a los jugadores extranjeros, contrataban por lo que te decían los demás jugadores, así fue conmigo, los que te conocían, porque fue el “Fantasma” Figueroa quien primero empezó a hablar de mi y así pude llegar a Morelia.
¿Cuándo llegaste a Morelia fuiste uno y cuando te fuiste, otro?
Toño siempre fue especial, no era el tipo de entrenador igual a otros, sino siempre andaba con su short y encuerado de la cintura para arriba, él hacía entrenamientos que no había visto, cosas sencillas que ocurrían en los partidos y uno decía, esto no es para mi, sino para chicos que van iniciando. Pero de pronto, te encontrabas en los partidos con esas cosas y quedabas sorprendido, fue un caso de entrenador antiguo que te estaba recordando las cosas y eso me llamó la atención y además con un carácter no muy sociable, pero después lo fui conociendo y esa era su personalidad hasta que me acostumbré a él.
¿Después te lo ganaste con tu rendimiento en la cancha?
Por supuesto y yo a Toño le agradezco todo lo bueno que habló a la prensa de mi, de reconocerme como uno de los mejores jugadores que tuvo a cargo como entrenador y haber visto a otros jugadores en los Mundiales. Él destacó que yo era uno de los jugadores que había visto con más talento en el mundo, lo agradezco, se lo aprecio, porque lo dijo en una entrevista para Chile que estaba muy entregado a mi futbol, porque dijo que era uno de los mejores mediocampistas que había visto en su trayectoria futbolística.