Diablos y Camoteros reparten puntos tras emocionante empate

Toluca y Puebla inauguraron la actividad de la tercera fecha en el presente torneo, y lo hicieron con empate 1-1 que dejó muchas más preguntas que respuestas respecto a lo propuesto en el terreno de juego. Con goles de Fernando Navarro y Robert Morales ambos conjuntos se llevan un punto a casa y se mantienen a la expectativa del resto de encuentros para conocer su lugar dentro de la tabla general.

Con un arranque cauto y sin intenciones de querer arriesgar, ambos conjuntos saltaron a la cancha para estudiar al rival y analizar su formación, antes de considerar hacer daño. Los primeros minutos se fueron en tocar y abrir el campo; no obstante, solo bastó una jugada que trascendió apenas el medio campo (minuto 22), para abrir el marcador y sorprender a propios y extraños por el ritmo que se había manejado.

Desborde en segundo sector, apertura por banda derecha, centro al área, y después de algunos amagos, así como una serie de rebotes, el balón le quedó pleno a Fernando Navarro, quien sin dudar, la prendió de pierna derecha, con parte interna, para mandarla a guardar a las redes y de paso, firmar la casi siempre infalible, “Ley del ex”.

Con el partido a su favor, los siguientes minutos se fueron en un constante ataque de los Diablos: llegadas por bandas; a balón parado; triangulaciones por el centro; y algunos avisos que no pasaban a más, hasta que finalmente un centro por izquierda, a escasos minutos del medio tiempo, permitió poner las condiciones iguales e ir a los vestidores con las acciones tal y se comenzaron.

Minuto 47, distribución de costado derecho al siniestro, pique a velocidad de Jean Meneses hasta línea de fondo, y centro con el guante, milimétrico, que cazó de gran manera el paraguayo Robert Morales, para con la testa enterrarla en el arco camotero.

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Al final, las situaciones de peligro se repartieron entre ambos equipos; sin embargo, la Franja tuvo la que a consideración personal, fue la más clara de todo el encuentro. Centro perfecto al área, y ni Cavallini, pudo llegar a tiempo solo para empujarla, así como Sansores no logró empujarla, sin portero, a las redes.