Vallejo, en la 'ruta de Carvajal'
Aragonés. Espigado. Criado en la exigente cuna de La Romareda y formado en la Bundesliga, donde casi nadie deja prisioneros. Se llama Jesús Vallejo. 20 añitos le contemplan. Tiene el honor de ser el central que va a ocupar la plaza vacante dejada por Pepe en el Madrid triunfal de Zidane. El chaval se ha ganado el respeto en Alemania, donde ha jugado 25 partidos en ese Eintracht de Francfort que ha completado una buena temporada. Vallejo habló en su momento con Carvajal, que le recomendó la experiencia de la Bundesliga. Carvajal, que ahora es sin discusión el mejor lateral derecho de Europa, emigró al Bayer Leverkusen cuando comprobó que Mourinho no confiaba en él. Un año más tarde regresó al Bernabéu con galones y reconocido como el dos más valioso de esa Liga en la que el Bayern Múnich se suele comer casi todo.
Vallejo no sólo ha cumplido en Francfort, ha rendido a un alto nivel. Allí ha comprobado el respeto que se tiene por el Madrid, dado que ese equipo fue el que perdió con los blancos la final de la Copa de Europa de 1960 en Glasgow con un resultado que ahora resulta estremecedor: 7-3. Vallejo no ha tenido complejos y se ha hecho hueco allí, compitiendo con centrales de más de 1,90 y con gente muy curtida. Pero a sus 20 años este chaval sólo tiene en su adolescente cabeza una idea: triunfar en el Madrid. El club blanco ya le ha comunicado que al irse Pepe (queda libre el próximo día 30) queda su plaza libre y que Zidane ha dado el visto bueno para ocupar ese hueco con él. Sabe que tiene por delante a Ramos, Varane y Nacho. Casi nada al aparato. Pero Vallejo no debe olvidar que en el Madrid la tierra es para el que la trabaja. Que se mire en el espejo de Nacho. Si te lo curras, tendrás premio seguro. Vallejo es uno más de ese proceso de lifting que el equipo se está haciendo con la llegada de Marcos Llorente (22 años), Theo (19), Borja Mayoral (20) y el propio Vallejo. Jóvenes, españoles (Theo es de nacionalidad francesa, pero se ha criado futbolísticamente aquí) y sobradamente preparados. Este es el camino…