¿Cómo era el mundo en 2003, cuando Verón llegó a Pumas?
Han pasado casi 14 años desde que el paraguayo arribó a la Liga MX. Se convirtió en el futbolista con más partidos disputados con los aurizaules.
Darío Verón debutó con los Pumas el 9 de agosto de 2003 en Guadalajara, en un duelo contra Atlas. 14 años después, el paraguayo dejó el club del Pedregal como el máximo representante del club en partidos oficiales, con cuatro títulos de liga en su haber y con el estatus de ídolo. Mucha agua bajo el puente.
Cuando Verón llegó a Pumas, el campeón vigente era el Monterrey dirigido por Daniel Alberto Pasarella, que había triunfado sobre el Morelia en la final del Clausura 2003. Guillermo Franco, Walter Erviti, Alex Fernandes, Pablo Rotchen, Luis Pérez y Jesús 'El Cabrito' Arellano integraban la columna vertebral de aquellos Rayados. La liga era dominada por José Saturnino Cardozo, cuyos 22 goles en la fase regular supusieron la segunda mejor marca en torneos cortos detrás de la que él mismo había logrado en el anterior campeonato. 'Chamagol' González, Reinaldo Navia, Jared Borgetti, Cuauhtémoc Blanco Omar Bravo, Rodrigo 'El Pony' Ruiz y Walter Gaitán causaban destrozos en las redes de los estadios a todo lo largo y ancho del país.
2003 fue el año en el que los Colibríes de Cuernavaca descendieron y desaparecieron mientras su afición festejaba su ilusoria permanencia echándose al riachuelo que rodeaba al Estadio Mariano Matamoros. 2003 era el año I del Lavolpismo en la Selección Mexicana: aquel verano, gracias a un gol de Daniel Osorno en tiempo extra ante Brasil, el argentino llevó al Tri a ganar su primera Copa Oro desde 1998 mientras el nombre de su némesis, Hugo Sánchez, era coreado por los asistentes al Estadio Azteca.
2003 fue el año del Milán de Ancelotti, campeón de Europa de la mano de Andriy Shevchenko en Old Trafford ante la Juventus; el año de Boca Juniors, una vez más, rey de América por tercera vez en cuatro años; el año del Mallorca, campeón de la Copa del Rey; el año de los Spurs de Pópovich; el que vio a Roger Federer coronarse en Wimbledon y firmar la primera página de su imborrable leyenda. El año lo escribieron Pavel Nedved, en oro (Balón de Oro) y Zinedine Zidane, investido por la FIFA como el mejor futbolista del mundo por tercera vez en su carrera. Mientras tanto, Ana Guevara se consagraba como campeona del mundo de los 400 metros planos en París y México se empachaba de oro, plata y bronce en los Panamericanos de Santo Domingo (79 preseas en total).
Cuando llegó Verón a Pumas, Sadam Hussein se escondía en un agujero después de haber sido depuesto por las fuerzas aliadas en una cruenta e injustificada guerra; el Concorde voló por última vez; Arnold Schwarzenegger se convirtió en el gobernador de California; 'El Señor de los Anillos' y 'Los Piratas del Caribe' dominaban las taquillas y la gente comenzaba a tomar fotos con sus celulares. Todo ello, cuando Darío Verón apenas llegaba a Pumas.