Un Ave María salvó a los universitarios de la derrota

Un Ave María salvó a Pumas de la UNAM de caer en el Estadio Jalisco frente a los Rojinegros del Atlas. Con atajadas de Óscar Ustari, un penal fallado, lo único que le quedaba a Pumas era un centro al área y esperar un remate, y así fue, con fuera de lugar incluído.

Desde temprano en el partido, los locales se fueron arriba con un golazo de Rodrigo Salinas, ex de Puebla y Monarcas, que se incorporó a los Rojinegros para este certamen. Un riflazo fuera del área salió de la pierna de Salinas, que previamente observó la posición de Marco Palacios y se incrustó en el arco de los felinos, en el 12'.

Pumas buscó por cielo, mar y tierra, pero no pudieron conseguir nada. Ustari salvó los fogonazos y los embates de los delanteros, que no concluyeron.

En la segunda mitad, Atlas arrancó con potencia y Pikolín Palacios salvó su arco de que cayera el segundo. 

La bola no mantenía un dueño claro y los embates de ambos equipos no terminaron por concluir el partido, o darle una mayor apertura.

A punto de que se acabara el duelo, el árbitro central marcó la pena máxima en favor de Pumas, que fue cobrada por Eduardo Herrera. Ustari se puso, nuevamente, la capa de Superman; adivinó a dónde iba el tiro y pareció que la noche para los Rojinegros era afortunada.

Con Darío Verón al frente y los centros bombardeando el área de Atlas, llegó en tiempo de compensación un re-centro de Verón, que dejó solo a Fidel Martínez frente a Óscar Ustari. Con la única misión de empujar el balón al fondo, Martínez anotó, pero en fuera de lugar, que no fue observado por el árbitro asistente.

Así finalizó un partido de arriba para abajo, falta de contundencia de ambos conjuntos, pero emocionante para los aficionados del fútbol.