Ignacio Ambriz mostró a unas Águilas diferentes en victoria

El puesto más duro y caliente lo tiene Ignacio Ambriz como director técnico de las Águilas del América. Que si no merece ese puesto, que si no se consiguieron los resultados en el Apertura 2015, que si los eliminaron en el Mundial de Clubes por un club chino, que si fueron controlados por el Puebla en el primer duelo del Clausura 2016. Muchas críticas han llegado para el ex asistente de Javier Aguirre; hoy, sus Águilas demostraron buenas cosas frente a los Rojinegros del Atlas.

Consciente de la presión que tiene en esa silla, incluyendo historia y afición, Ambriz mostró mejoría en el terreno de juego. Ofensivo, dejando unos huecos en la defensa, pero un equipo vistoso que, seguramente, a toda la afición águila, les gustó esta versión de su equipo.

En un primer tiempo con llegadas de ambos equipos y una jugada circunstancial que puso adelante al América, y un gol anulado controversial, las Águilas y los Zorros dieron buen espectáculo.

Un servicio por el sector derecho y que podía controlar Miguel Fraga, lo desvió Álvaro González y se incrustó en el arco Rojinegro. Así se fueron al descanso, con un partido abierto y que cualquiera se lo podía llevar, aunque el América estaba arriba en el marcador, tenía más posesión del balón y llegadas más claras.

El segundo gol cayó por conducto de Oribe Peralta en la parte complementaria. Darío Benedetto filtró una diagonal al hueco que dejaron los defensas centrales, Peralta se enfrentó solo a Fraga que salió a achicar y el seleccionado mexicano picó el balón para poner el 2-0.

Un minuto después, Rubens Sambueza se encontró con los descuidos defensivos y no desaprovechó la chance que le otorgaron. Con velocidad y Felipe Baloy en busca del balón, el nacionalizado mexicano cruzó a Fraga para sepultar al Atlas en el Estadio Jalisco por 3-0.

La frustración Rojinegra siguió a la mitad del segundo tiempo. En un balón dividido, Walter Kannemann y Sambueza llegaron en busca del esférico, o eso parecía en primera instancia, pero no. Walter dejó los tachones en el tobillo de Rubens, que se revolcó el dolor y provocó la furia de Michael Arroyo que llegó a empujarlo. Enseguida, Baloy defendió a su compañero, lo tomó por el cuello y provocaron un conato de bronca que no pasó a mayores, pero Arroyo se fue expulsado, y Kanneman y Baloy, se salvaron de la tarjeta roja.

Con un partido vistoso, lleno de acción y opciones de gol, se fue este duelo que parará las críticas a Ignacio Ambriz, por lo menos, una semana.