W Deportes
NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA
Vídeos
Action photo during the match Legends of Mexico vs Leyendas de LaLiga match at Estadio Nemesio Diez,

Foto de accion durante el Partido Leyendas de Mexico vs Leyendas de LaLiga, en el Estadio Nemesio Diez, en la foto: Braulio Luna celebra gol de Mexico

31/03/2017/MEXSPORT/Javier Ramirez.
Action photo during the match Legends of Mexico vs Leyendas de LaLiga match at Estadio Nemesio Diez, Foto de accion durante el Partido Leyendas de Mexico vs Leyendas de LaLiga, en el Estadio Nemesio Diez, en la foto: Braulio Luna celebra gol de Mexico 31/03/2017/MEXSPORT/Javier Ramirez.JAVIER RAMIREZMEXSPORT

Futbol Mexicano

Braulio Luna advierte que los clubes están “matando” la picardía del jugador mexicano

Aseguró a AS México, que priorizan estatura y condición física sobre el talento natural de los jóvenes prospectos en los clubes mexicanos.

Ciudad de México

Braulio Luna, ex figura de Pumas, América, Necaxa y San Luis, así como mundialista en Francia 1998 y Corea y Japón 2002, puso el dedo en la llaga sobre un fenómeno que puede impedir que el futbol mexicano avance en su proyecto de recuperar la credibilidad internacional después de los fracasos de Qatar 2022 y Nations League 2023 en virtud de que la mayoría de los clubes de la Liga Mx están “matando” la picardía innata del jugador mexicano por priorizar el biotipo atlético de los jugadores modernos con un gran trabajo físico, pero con graves deficiencias técnicas.

Te podría interesar: Guillermo Ochoa perdió por primera vez en Copa Oro luego de 16 años

En charla con AS México, Luna, expuso sobre este asunto que está aconteciendo en el futbol mexicano en que no están surgiendo las grandes camadas de jugadores mexicanos como en antaño, “porque hoy se preocupan más por hacer atletas, hoy se preocupan más todos los equipos de la primera división en tener métricas para sus jugadores o para sus prototipos de jugadores, que trabajar técnica individual, que trabajar en espacios reducidos, que trabajar cosas con balón para que cada vez sean mejores, tu los ves hoy, están fuertísimos, cada vez están más altos los futbolistas, pero cada vez son menos capaces con la pelota, entonces tienes que traer la vieja escuela con la actual, fusionar y tratar de traer equilibrio, esa sería una de las grandes soluciones”, dijo.

También expuso en este tema “porque hoy en día y lo pueden investigar, la mayoría de los clubes tiene ya el prototipo, si eres defensa central, pon tu en Necaxa tienes que medir más de 1.80 metros o 1.82 metros, si mides menos de eso no puedes llegar a ser central de Necaxa, si quieres ser lateral si no mides mínimo 1.78 metros, no puedes ser lateral de Necaxa, centro delantero están pidiendo 1.85 metros, contención piden 1.80 metros, volantes 1.78 mínimo.

¿De pensar que Luis García con menos estatura fue figura de un Mundial y ahorita no tendría cabida?

Exacto, Luis García no tendría cabida aquí o cualquier destacado con una talla pequeña, aquí tienes que ver el genotipo del jugador y potenciarlo con medicina deportiva, con los preparadores físicos, con trabajo compartido, con temas sicológicos, con temas, pero todo equilibrado, pero no puedes decir que si no mides tanto no puedes jugar al futbol, eso para mi atenta con muchas cosas, hay que tener un término medio y por eso no hay en el futbol mexicano y por eso no hay camadas.

¿Entonces si se basaran en ese genotipo actual, no habría los Omar Bravo, los Venado Medina, los Ángel Reyna o los Miguel Sabah, hablando de centros delanteros, pero no es una constante?

Exacto, si tienen esas condiciones y olfato de gol y si se trabaja de una manera física como se trabaja el día de hoy, que máquinas vas a tener, pero si desde fuerzas básicas ya estás descartando al chavito bajito, talentoso, juega muy bien, pero vas a ver que no va a crecer y no cumple con los parámetros que tenemos y estás desechando demasiado talento, eso es desechar demasiado talento, con esas métricas, no la clásica que me pidieron dinero y me lastime mi rodilla, los recomendados, el 85 por ciento no existe, quizá el cinco por ciento llegó y le echaron la mano, quizá uno o dos tuvieron una carrera exitosa, quizá eso, que digan que llega el que dio el dinero o que llegó recomendado, pero ahora está llegando el mejor atléticamente, que técnicamente.

Sentenció que “los clubes están muy cerrados en ese tema, te imaginas, el Pony Ruiz no podría jugar ahorita y es el que más asistencias en la historia del futbol mexicano tiene. Tienen que tener ese término medio, tener al jugador talentoso e invertir en él, en sus comidas, en sus vitaminas”, aseguró.

Añadió también que “el tema hoy en día, hay que estar en el día a día de la evolución del futbol mexicano y hay un tema en donde uno debe ser mesurado, en selección mayor todos hemos llegado hasta el cuarto partido, ha habido selecciones que han jugado unas mejor que otras, yo tuve la suerte de salir de una gran camada cuando debuté en Pumas, Cuauhtémoc Blanco también tuvo esa suerte y Cabrito también, en ese aspecto, también es cierto que también salen menos jugadores, sí, pero también hay un porqué, hoy en día uno le puede decir al seleccionado nacional que no siente la camiseta, pero tu lo ves y están más fuertes físicamente que nosotros antes, físicamente, pero oye con qué se juega el futbol, pues con la pelota, entonces es traer o mantener la vieja escuela con ejercicios evolucionados y sofisticados con la pelota y metiéndoles todo el tema tecnológico y actual del aspecto físico”, precisó.

La advertencia de Luna sale a colación en los momentos en que la selección nacional está pasando problemas para hacer la renovación natural que debe tener todo representativo, “pero si uno ve, pues existen complicaciones para renovar a los jugadores, por ahí existen quejas de que Memo Ochoa ya no debería seguir en la selección, pero el problema no es de Memo, sino de quien no le hace competencia, ahí la obligación es para Carlos Acevedo o para cualquier otro portero que quiera ocupar su sitio”, concluyó.