Néstor Araujo y el triunfo de la perseverancia
El central del RC Celta de Vigo es uno de los futbolistas de moda en LaLiga y aspira a seguir creciendo tras una carrera marcada por su inquebrantable mentalidad ganadora.
Cuando, siendo un crío, acompañaba a su padre al Estadio Jalisco para ayudarle en la reventa de entradas con la que su familia se apoyaba para llegar a fin de mes, poco imaginaba el pequeño Néstor Araujo que iba a convertirse en uno de los defensas más importantes de México, campeón de la Primera División mexicana y hasta un miembro destacado del Tri que se colgó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de 2012 celebrados en Londres.
Alcanzar la élite no fue fácil para él, pero el hoy central del RC Celta de Vigo supo tener la paciencia necesaria para empezar desde la Tercera División mexicana hasta consolidarse como uno de los defensas más solventes de LaLiga Santander.
Agradecido a su hermano Félix
Dio el salto casi de rebote pues fue su hermano mayor Félix -actualmente sin equipo tras desvincularse de Cafetaleros de Tapachula hace tres años- quien recomendó su fichaje a Cruz Azul en 2007 en edad de juvenil. Sólo tres años más tarde alcanzaba el primer equipo de la mano del técnico Enrique Meza y rápidamente se acostumbró a la titularidad a la par que se confirmaba como elegible para la selección sub-20 de su país.
Fue una etapa en la que dejó buena constancia de virtudes tan destacadas como su gran presencia física y el excelente manejo de balón, capaz de ofrecer soluciones a su equipo por asfixiante que fuera la presión del rival.
Santos Laguna y los primeros éxitos sonados
Estas credenciales le sirvieron para ingresar en Santos Laguna en 2014. Lo hizo después de levantar la Copa MX, el único título que pudo celebrar con Cruz Azul. Pero con los laguneros logaría, además de otro título copero, los dos primeros -y hasta la fecha, únicos- campeonatos de su carrera, al proclamarse campeón de la Primera División mexicana en 2015 y 2018.
Este segundo título liguero representó un importante consuelo al no poder participar en la Copa del Mundo de aquel verano por culpa de una inoportuna lesión. Sin embargo, su vida estaba a punto de dar un nuevo salto ya que, como sucediera cuatro años atrás, cambió de equipo tras celebrar un título. Había llegado el momento de probarse en Europa.
El RC Celta le dio la oportunidad en Europa
Fue el RC Celta el equipo que apostó por él y desde el primer día ejerció como uno de los pilares del equipo ahora de Eduardo Coudet junto al colombiano Jeison Murillo, un central con el que forma una de las parejas defensivas más importantes de LaLiga Santander.
Intocable desde su llegada a Vigo, el central vive con naturalidad su continua progresión, y a pesar de que admite que no descarta un posible regreso a México en el futuro, actualmente sólo piensa en seguir creciendo en España, según ha expresado el propio jugador en ocasiones. Aun encontrándose en el mejor momento de su carrera, Araujo siente que no tiene techo y quiere seguir demostrándolo