América derrotó a Necaxa en la jornada 13 del Guardianes 2021

Mientras que el América de Santiago Solari siga sumando y batiendo récords, la duda que levanta con su estilo de juego seguirá clavada en el terreno de la anécdota, de las cosas para arreglar después y nada más. Llegó el séptimo triunfo en casa para las Águilas, ahora sobre Necaxa por 2-1, y, tal y como sucedió con los anteriores, hubo que sudar de más para conseguirlo.

Este América eriza la piel. Tensa el nervio. No juega vistoso, ni de cerca, pero tampoco lo hace mal, o mejor dicho, es efectivo. Y, como ya se dijo, mientras la estadística lo respalde, no hay margen para reproches a Solari.

Incluso, al técnico argentino lo bendice el tino cuando parece que sus decisiones pueden rayar en lo incomprensible. Y es que ante Necaxa, las ausencias de Córdova y Martín, lo obligaron a mover el ajedrez, llevándolo a apostar, otra vez, por Giovani dos Santos.

Y Gio no hizo nada en su estancia en la cancha más que el gol del triunfo. Así la vena de Solari. Y, claro, también la de Gio. Dos Santos no anotaba desde septiembre pasado, en el Clásico ante Chivas. La sequía la vino a romper ante un equipo que, si algo estaba haciendo bien, era defenderse, como Necaxa. De ese tamaño es la fortuna de este América.

Porque Necaxa estaba justificando porque había sido uno de los "cocos" de los de Coapa en los últimos torneos. No era estadística vacía aquella de los cuatro años sin que América pudiera derrotar a los Rayos.

Los de Aguascalientes se metieron al estadio Azteca a defenderse, a complicarle el trámite al local y esperar una jugada a balón parado, un error o una genialidad para sorprender. El plan lo consumaron a la perfección al minuto 39, con una jugada de lujo de Zendejas por banda izquierda para habilitar a Maxi y éste para Barragán. Gol.

Necaxa, tal vez, no lo había buscando con ahínco, pero nadie podría decir que era injusto verlo arriba en el marcador, porque no había sido menos que su rival.

En América, Gio desaparecido, Roger corriendo por todas pero ganando muy pocas, Fidalgo abrumado con la salida de los necaxistas... Colapso que ni para arañar al rival. Pero si algo ha sostenido a este América y sus brillantes números, son las individualides. No el juego de conjunto.

Así que una de esas volvió a sacar la cara: último minuto del primer tiempo, tiro libre a las afueras del área del Necaxa y, con el sello de la casa, Richard Sánchez la metía para darle el empate a los de Coapa.

Para la segunda mitad, la historia no cambió demasiado y fue en otra jugada a balón parado donde América definió el encuentro. Era el minuto 59, Sánchez cobró con centro al corazón de área, donde Giovani se levantó para ganar la marca y, de cabeza, rematar para darle la vuelta al marcador. Era el 2-1.

Y así, con lo justo, América selló su séptimo triunfo en casa y se mantiene a la caza del superliderato de Cruz Azul.