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PREVIA | FINALES LNBP 2019-2020

Soles y Fuerza Regia, dos dinastías en ciernes en la LNBP

Las finales de la LNBP 2019-2020 están plagadas de ingredientes: dos equipos ganadores, coaches españoles, una revancha y un posible bicampeonato.

MéxicoActualizado a
Soles y Fuerza Regia, dos dinastías en ciernes en la LNBP

El clásico de la Liga SiSNova LNBP llegó a las finales de la temporada 20° del circuito. Qué mejor regalo de aniversario. Soles de Mexicali y Fuerza Regia, sobrevivientes de dos finales zonales de infarto, colisionarán en una final cumbre, aderezada, rebosante de ingredientes y artilugios, y una promesa de largometraje. El trono de la LNBP espera por una historia digna de contar: el bicampeonato de Fuerza Regia, que sería el primer equipo en revalidar desde Halcones UV Xalapa, o el tercer título en cinco años de los Soles de Iván Déniz. Como sea, una dinastía será consagrada.

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Hay un aire de revancha. Flashback, marzo 2017. Soles y Fuerza Regia. Iván Déniz y Francisco Olmos en los banquillos. Inicio en Monterrey, medianía en Mexicali y cierre de vuelta en ‘La Sultana’. Tres años antes y todo sigue (casi) igual. ‘La Fuerza’ sentenció en seis partidos con Andrew Panko, Héctor Hernández y Juan Toscano como baluartes. Fue el primer cetro de Francisco Olmos en México y un alivio para la familia Ganem, ávida impulsora del baloncesto mexicano, que rompió la maldición de 16 años de existencia sin trofeo en las vitrinas. Jordan Glynn, Cristian Cortés, Jeleel Akindele (Fuerza Regia), Lucas Martínez y José Estrada (Soles) sobreviven de aquel antecedente.

Otro frente está abierto desde España. Iván Déniz y Francisco Olmos tienen en la mira su tercera LNBP. El vencedor será el coach más laureado en activo en la liga. Digna condecoración para acompañar la instauración de una dinastía. Déniz, tinerfeño, es una institución en el baloncesto mexicano. Comanda a un equipo de autor, plagado de recursos, metódico e intenso; arquitecto de un modelo a prueba de plazos y deserciones: pese a la usual danza de altas y bajas de cada inter-temporada, los Soles no se ausentan de las finales de zona/conferencia desde 2014. Y nunca han quedado fuera de playoffs desde su nacimiento, allá por 2005, dos años antes del desembarco de Déniz. Olmos, nacido en Valencia, se curtió en uno de los protagonistas de la liga ACB española, el Valencia Basket, adquirió experiencia en Puerto Rico (Cangrejeros, Atenienses y selección) y recaló en Fuerza Regia para coronar el proyecto de Sergio Ganem. Comparten ética de trabajo, metodologías, devoción por la perfección y admiración mutua. La final también está en los banquillos, ocupados por dos entrenadores españoles por cuarta ocasión consecutiva.

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La serie abrirá en el Auditorio PSF fronterizo, fortín inexpugnable en el que la quinteta de Déniz solo ha caído en dos ocasiones en toda la temporada. Atrás quedó el trauma por el que ambos equipos debieron pasar para confirmar su boleto; Aguacateros de Michoacán (vs Soles) y Mineros de Zacatecas (vs Fuerza Regia) llevaron sus respectivas eliminatorias a la histeria (las dos se decidieron en siete partidos). Del traumatismo los dos contendientes salieron fortalecidos. Déniz explicó en la previa que Aguacateros les obligó a probar todos sus límites, técnicos y físicos, y les ha hecho estar conscientes de su inmenso potencial, sustentado en la habilidad de Lucas Martínez, líder del equipo en promedio de puntos (14.13), rebotes (5.15) y asistencias (3.52), y la potencia de Daniel Amigo en ambas pinturas (2.02 rebotes ofensivos y máximo anotador de dobles: 215).

Fuerza Regia revirtió un inicio turbulento de curso. Después de los primeros ocho cotejos, la marca del equipo estaba situada en la nulidad (4-4). “Teníamos que convencer al equipo de que no estábamos en el camino correcto para repetir el campeonato. La química creció, fue un esfuerzo tortuoso, titánico, pero finalmente lo logramos”, compartió Olmos. La temporada, en efecto, fue un tanto conflictiva. Al valenciano se le conjugaron las lesiones Carlos Rivera, Josh Ibarra, Aaron Fuller y la prematura salida del mundialista argentino Marcos Delía. Desacostumbrado a hacer cambios a su roster, autorizó la inclusión de David Cubillán, Javier Mojica y Oderah Anosike. Y todos supieron entrar en un sistema abanderado por David Huertas (15.47 puntos de media, 55% de efectividad de campo). Los ingredientes están servidos. Que venga la gran final. El clásico. La historia.