Después de Javier Aguirre, Egipto no contratará a DTs extranjeros
El presidente de Egipto, Abdel Fattah Al-Sisi, conminó a la Asociación de Fútbol de su país a reclutar a técnicos locales para dirigir a los 'Faraones'.
El terremoto que causó en el fútbol egipcio la eliminación de su selección nacional de la Copa África 2019 aún causa réplicas. El presidente del país, Abdel Fattah Al-Sisi, vetó que la Asociación de Fútbol contrate los servicios de un director técnico extranjero tras la fallida gestión de Javier 'Vasco' Aguirre, quien no pudo guiar a 'Los Faraones' a conquistar la Copa África 2019 de la que fueron anfitriones.
“No vamos a contratar a un extranjero otra vez. Tenemos suficientes entrenadores egipcios. El Ministerio de Juventud y Deportes me confirmó que el próximo técnico (de la selección) será egipcio. Tenemos que darles la oportunidad", refrendó el mandatario durante el Foro de la Juventud, 26 días después de que el equipo comandado por Aguirre cayó 0-1 con Sudáfrica en los octavos de final del campeonato continental, frente a 75,000 aficionados congregados en el Estadio Internacional de El Cairo. La temprana eliminación significó la peor puesta en escena de Egipto en Copa África desde 2004, edición en la que no superaron la fase grupal. El experimento-Aguirre no satisfizo al mariscal Al-Sisi.
La última ocasión en la que 'Los Faraones' se consagraron como campeones del 'continente negro' fue en 2010, en Angola. Después se sucedieron tres ediciones a las que no clasificaron y volvieron hasta Gabón 2017, donde obtuvieron el subcampeonato. Desde 2011, tres extranjeros han ocupado el timón de la selección egipcia: Bob Bradley (2011-2013), Héctor Cúper (2015-2018) y Aguirre (2018-2019). Solo Shawky Gharib (2013-2014) opositó a la usanza foránea. Pese a no reportar títulos oficiales, Cúper devolvió a 'Los Faraones' a la Copa del Mundo de la FIFA en Rusia 2018 después de 28 años de ausencia; la última vez que Egipto se había presentado en el máximo escenario del balompié mundial fue en Italia '90. El legendario Hossam Hassan, segundo máximo representante en la historia de la selección (169 partidos), lidera los pronósticos para tomar la vacante que dejó Aguirre.
La decisión de Al-Sisi, en el poder desde que fraguó un golpe de Estado en 2013 para derrocar al entonces presidente, Mohamed Morsi, atentaría contra los principios de no-intervención política que clama la FIFA. Los estatutos del máximo organismo del balompié prohíben cualquier tipo de injerencia gubernamental en sus federaciones miembro, so pena de suspensión y consiguiente desafiliación. El 19° artículo de los estatutos de FIFA estipula: "Todas las federaciones miembro administrarán sus asuntos de forma independiente y sin la injerencia de terceros". Además, el 15° artículo consagra la autonomía de las federaciones frente a injerencias políticas como un requisito determinante para mantener su registro oficial.
Aunado al despido de Aguirre, la cúpula de la Asociación egipcia de fútbol dimitió en pleno, encabezados por su presidente, Hani Abou Rida, tras la eliminación a manos de Sudáfrica. La Asociación, actualmente, está dirigida por Tharwat Sweilam, quien deberá convocar a nuevas elecciones para definir a su sustituto.