Paolo Banchero y la resaca post-Mundial: “Aprendí a ser un mejor compañero”

Paolo Banchero es una de las caras de la NBA actual. Una de las caras del futuro. Con apenas un año en la liga ya se ha hecho de un nombre y, también, de una decepción. Tan pronto, ya tiene sed de revancha. Banchero fue una de las bazas de la Selección de Estados Unidos en la Copa del Mundo de la FIBA. Sin embargo, el camino fue mucho más espinoso que lo esperado. Tras sendas derrotas ante Lituania, Alemania y Canadá, el ‘Team USA’ de Steve Kerr tomó la puerta de salida, sin medalla, y con el prestigio herido. Vuelta a la página, pero con lecciones aprendidas. El mal trago en Manila es una de esas experiencias, amargas, duras, necesarias para la forja. Para la excelencia. El infierno antes del paraíso.

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“Lo mas importante que aprendí fue a ser un mejor compañero. No era titular y tuve que adecuarme a eso. Tuve la oportunidad de ayudar a mis compañeros desde la banca. Entendí que había otras formas de ayudar a mis compañeros que de la forma en la que estoy acostumbrado en Orlando. Ojalá pueda ser capaz de traer un poco de esa experiencia aquí y mejorar como jugador”, aseguró Banchero, cuestionado por AS al concluir el entrenamiento del Magic en la Arena Ciudad de México, antes de enfrentar a los Atlanta Hawks en la capital nacional. Por ahora, el Rookie del Año de la temporada 2022-2023 de la NBA no vislumbra volver al ‘Team USA’ en breve. Los Juegos Olímpicos de París están a la vuelta, pero Banchero no se lo piensa, aún: “No lo sé, quién sabe, no estoy seguro. Sólo quiero disfrutar de la temporada”.

Banchero enfrentó en la semifinal del Mundial FIBA a sus compañeros del Magic, Franz y Moritz Wagner, los hermanos que, junto a Dennis Schröder, guiaron a Alemania a su primer título global. El tándem Wagner fue decisivo para la consagración germana en Manila. “Fue muy bueno haber jugado contra ellos en el Mundial, son muy buenos amigos, competir contra ellos con mi país fue maravilloso, y es algo que no olvidaré. Entran a esta temporada en un gran momento y nos ayudarán a ser un mejor equipo”, compartió el nacido en Seattle sobre la duela de la Arena CDMX. De aquel cardíaco partido, celebrado Mall of Asia Arena, salió triunfante Die Mannschaft 111-113 con un stepback clutch de Dennis Schröder a un minuto de la bocina final. Banquero ingresó desde el banquillo para dejar 6 puntos, 2 rebotes y 3 asistencias en su hoja estadística, sin metal de premio.

Los números del hundimiento en Manila

En Filipinas, Banchero, que hasta el último momento amagó con disputar el Mundial con Italia y no con Estados Unidos, promedió 17.3 minutos de acción, 9.3 unidades, 3.4 rebotes, 1.6 asistencias, 0.6 robos y 0.9 bloqueos. Cifras insuficientes para una estrella de su calibre y sus alcances. La debacle de Manila. Pero viene la hora de la revancha. Los Hawks, en la Ciudad de México, podrían ser una de sus primeras víctimas.

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