México buscará dejar atrás su pasado reciente en el Clásico Mundial de Beisbol
Las últimas dos ediciones fueron de pesadilla para la novena tricolor, pues el sueño terminó apenas en la primera ronda
La Selección Mexicana de Beisbol buscará dejar atrás un oscuro pasado reciente en el Clásico Mundial, pues en las últimas dos ediciones, la novena tricolor no pudo pasar de la Primera Ronda, incluso, en ambas ocasiones, terminó en el último lugar de su grupo.
A pesar de estar considerada entre las 10 mejores selecciones del mundo, los resultados no han acompañado a México, ya que en ninguna de las cuatro ediciones pasadas ha podido avanzar más allá de la segunda ronda, sin embargo en las dos más recientes ediciones, el equipo nacional no pasa del primer escalón.
En la edición 2013, la novena azteca cayó en su debut frente a Italia 6-5, mientras que en el segundo encuentro derroto 5-2 a Estados Unidos. Lamentablemente para México, su verdugo fue Canadá en el tercer encuentro, quien con paliza de 10-3 terminó con el sueño verde de avanzar a la siguiente ronda.
2017 y el desastre en Guadalajara
México acudió al Clásico Mundial 2017 como anfitrión del evento, pues el Estadio Panamericano de Guadalajara fue ocupado para la Primera Ronda. En el debut, Italia volvió a superar a la novena mexicana, mismo caso ante Puerto Rico, donde los boricuas triunfaron 9-4. Para el último encuentro, los verdes vencieron a Venezuela 11-9 y ahí vino una novela que terminaría hasta altas horas de la madrugada.
Al finalizar emptados en prácticamente todo, Italia, Venezuela y México tuvieron que irse a las calculadoras para ver quién calificaba al juego de desempate. Tras varias revisiones minuciosas al reglamento y luego de horas de espera, se determinó que sudamericanos y europeos disputarían al día siguiente el encuentro por la calificación, poniéndolse así fin a la participación tricolor en dicho evento.
Ahora, con una selección más madura y con más participación en Grandes Ligas, México buscará en Phoenix dejar atrás el pasado reciente y de una vez por todas confirmarse como uno de los mejores combinados de todo el planeta.