Dominio de dos décadas y ADN ganador; los Diablos Rojos a extender su legado histórico
Los Pingos no solo van por un nuevo campeonato; están frente a la oportunidad de reafirmar 20 años de dominio y récords difíciles de alcanzar en la Liga Mexicana de Béisbol.
Si en el béisbol mexicano hay un equipo que sabe moverse con comodidad cuando llegan a Serie del Rey, es indudablemente el de los Diablos Rojos del México. Los capitalinos han hecho de la fiesta grande su segunda casa y lo reafirman con los números entregados a lo largo de la historia: 17 coronas conseguidas en 24 apariciones.
Sin embargo, hay datos que dentro de la grandeza, lucen todavía más interesantes. El dominio Escarlata en las últimas dos décadas se mide con una lupa distinta: Campeones en 5 de sus 6 citas; y solo una sola caída ante los Tigres en 2011. La narrativa es clara, cuando los Diablos llegan a la final, casi siempre la ganan.
- 2002: vencieron 4-3 a los Tigres
- 2003: vencieron 4-1 a los Tigres
- 2008: vencieron 4-1 a los Sultanes
- 2011: perdieron 4-0 ante los Tigres
- 2014: vencieron 4-0 a los Pericos
- 2024: vencieron 4-0 a los Sultanes
La mira vista en un histórico cuarto bicampeonato
El dato adquiere mayor relevancia ahora que el equipo escarlata busca defender la corona conseguida en 2024. Sería el bicampeonato número cuatro en su historia, después de los logrados en 1973-74, 1987-88 y 2002-03. Tres generaciones distintas, tres timoneles históricos (Wilfredo Calviño, Benjamín “Cananea” Reyes y Bernie Tatis) pero un mismo ADN ganador; Lorenzo Bundy tras el mismo sueño.
Vale la pena mencionar que este hito, no es nada sencillo repetir en el beisbol de la LMB. Apenas 12 equipos en toda la historia lo han conseguido y ninguno ha podido hilar tres al hilo. Los Diablos, de lograrlo, no solo sumarán su campeonato número 18, también confirmarán que su hegemonía no es cosa del pasado, sino del presente.
22 años para repetir la hazaña
Además, lo que hace especial este momento es el regreso de la consistencia. Pasaron 22 años para que el México volviera a jugar finales en temporadas consecutivas. La última vez fue en la época dorada de inicios de siglo, cuando disputaron la Serie del Rey cinco años seguidos (1999 a 2003). Aquella fue una racha que consolidó a los escarlatas como el “gigante” de la LMB y que hoy, dos décadas después, parece revivir.
En números fríos, los Diablos presumen 17 títulos y 24 finales jugadas antes de esta. Una marca que ya los coloca por encima de cualquier otro equipo de la Liga. Pero en lo narrativo, lo que alimenta la historia es esa mezcla de tradición y vigencia: los campeonatos de los 70 y 80 con figuras legendarias, la potencia de los 2000 ante Tigres y Sultanes, y la frescura del 2024 con un roster que supo reinventarse.
Así que sí, los Diablos Rojos no solo van por un nuevo campeonato: están frente a la oportunidad de reafirmar 20 años de dominio casi absoluto. La Serie del Rey 2025 será el escenario perfecto para descubrir si la capital vuelve a presumir bicampeonato o si toca esperar otro capítulo en la novela más exitosa del béisbol mexicano.
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