México, lejos de la cima pero dentro del Top 20: los favoritos del Mundial 2026 antes del sorteo
El Tri llega a su noveno Mundial consecutivo con el impulso de ser anfitrión y afronta su 18ª Copa del Mundo en la que tendrá que desafiar las proyecciones.
A pocos días del sorteo de la Copa Mundial de la FIFA 2026, la 23ª edición del torneo que se celebrará el viernes 5 de diciembre, comienzan a intensificarse los análisis y las proyecciones sobre la cita mundialista. Con un formato ampliado, más selecciones y un calendario sin precedentes, las expectativas crecen mientras el mundo aguarda la conformación de los grupos.
En ese escenario, la supercomputadora de Opta adelantó sus primeras estimaciones, y allí aparece México con un lugar definido entre las selecciones participantes: el Tri figura en el puesto número 13, con una probabilidad de 1.3% de pelear por el título. Una posición que, aunque moderada, reafirma la presencia constante de la Selección Nacional en la conversación global.
México llega a esta cita con una mezcla de historia, tradición y presión. El Tri disputará su 18ª Copa del Mundo, la novena de manera consecutiva, una racha que lo mantiene como un actor estable en el escenario internacional. Sus mejores actuaciones ocurrieron precisamente cuando fue anfitrión, en 1970 y 1986, al llegar hasta los cuartos de final.
A pesar de ello, la selección carga con un dato peculiar: posee el récord de más partidos jugados en Mundiales sin haber conseguido el título, sumando 60 encuentros sin coronarse. Un registro que refleja constancia, pero también una deuda histórica que la afición anhela ver saldada.
En el panorama general, las proyecciones señalan un claro dominio europeo y colocan a España como la máxima favorita: con un 17% de probabilidades, la Roja encabeza las estimaciones de Opta rumbo al 2026. Por detrás se posicionan Francia (14.1%) e Inglaterra (11.8%), completando un podio netamente europeo. Más abajo aparecen potencias históricas como Argentina (8.7%), Alemania (7.1%), Portugal (6.6%) y Brasil (5.6%). México, por su parte, se sitúa por debajo de otras selecciones sudamericanas como Colombia, Uruguay o Ecuador, aunque se mantiene dentro del codiciado Top 20.
El desafío es claro: ser anfitrión puede convertirse en un impulso invaluable o en una presión añadida. De cualquier forma, la Copa del Mundo de 2026 representa para México una oportunidad única para transformar su regularidad histórica en un salto competitivo real.
Con el sorteo a la vuelta de la esquina, el camino comienza a trazarse. Lo que suceda en 2026 podría redefinir la relación del Tri con los Mundiales y abrir un nuevo capítulo en su historia.
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