Maldición de oro rumbo al Mundial
De Di Stéfano a Benzema, cada crack que levantó el máximo galardón individual, llevó consigo un fantasma que hasta el momento, no ha podido desaparecer.
El futbol se alimenta de mitos y supersticiones, pero pocas tienen tanto peso como la llamada ‘Maldición del Balón de Oro’. Y es que ningún ganador de la condecoración, durante la coronación previa al máximo evento futbolistico, logró ver a su selección alzar la Copa del Mundo. Ahora, con Ousmane Dembélé como el privilegiado del 2025, es que Francia corre peligro.
Todo comenzó en 1957, cuando Alfredo Di Stéfano fue nombrado el mejor del planeta, pero España ni siquiera clasificó a Suecia 58. Cuatro años más tarde, Omar Sívori se llevó el premio también; sin embargo, Italia cayó en la fase de grupos, durante la violenta “Batalla de Santiago”.
En 1965, Eusébio brilló como rey de Europa y máximo goleador en Inglaterra 66, pero Portugal se quedó en semifinales. Lo mismo ocurrió con Gianni Rivera en 1969: Italia llegó a la final del 70, pero fue arrasada por el Brasil de Pelé. Y en 1973, Johan Cruyff deslumbró al mundo con el ‘fútbol total’, aunque Paises Bajos cayó en la final del 74 ante Alemania.
La lista siguió creciendo. Allan Simonsen (1977) ni siquiera pudo disputar Argentina 78 con Dinamarca. Karl-Heinz Rummenigge (1981) perdió la final del 82. Michel Platini (1985) se quedó en semifinales con Francia de México 86. Marco van Basten (1989) no pasó de octavos en Italia 90. Y en 1993, Roberto Baggio terminó con la imagen más amarga: fallando el penal que le dio a Brasil el título en USA 94.
Ni siquiera los gigantes sudamericanos escaparon. Ronaldo Nazário (1997) llegó a la final del 98, pero Francia lo humilló 3-0 en París, en medio de su famoso colapso físico. Ronaldinho (2005) se apagó con Brasil en Alemania 2006 ante la propia Francia. En tiempos más recientes, Lionel Messi (2009) fue borrado en cuartos por Alemania en Sudáfrica 2010, y Cristiano Ronaldo cargó dos veces con la maldición: en 2013 quedó fuera en fase de grupos en Brasil 2014, y en 2017 fue eliminado en octavos en Rusia 2018.
La última víctima fue Karim Benzema (2022). Aunque Francia llegó a la final en Qatar, el delantero se quedó fuera por lesión y el título terminó en manos de Argentina. La excepción aparente fue Messi, que tras ganar el Balón en 2021 se coronó en 2022, aunque estrictamente no rompió la estadística, pues con un Mundial invernal, fue Benzema el último que se hizo con el galardón.
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Hoy, con Dembélé en la cima individual, la pregunta regresa: ¿será Francia capaz de desafiar al mito en 2026 o la maldición volverá a cobrarse otra víctima?
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