La ventaja invisible del Tri: por qué nadie en Europa quiere ser la primera bola del grupo de México
El sorteo del viernes develará cuál será el rival de México en su partido inaugural; los equipos europeos podrían padecer a causa de la altitud.
Este viernes se llevará a cabo el sorteo del Mundial. El rival de México en el partido inaugural podría ser de Europa, en concreto Noruega o Escocia, y dadas las condiciones geográficas de la capital del país, el rendimiento de sus seleccionados podría verse mermado.
Opinión de especialistas sobre el rendimiento en altura
El preparador físico Daniel Ipata, especialista en la materia, considera que la altura de la capital mexicana es un factor que debe evaluarse seriamente.
Aunque no se trata de un nivel extremo como La Paz, Bolivia, señala que los 2,240 metros sí representan una carga que el cuerpo resiente, especialmente para quienes no están adaptados.
Cómo afecta a los futbolistas que vienen de Europa
Ipata explica que los jugadores que pasan años en Europa, donde entrenan con temperaturas moderadas y mayor concentración de oxígeno, enfrentan un cambio fisiológico importante al volver a la CDMX.
“No es un tema drástico, pero sí relevante si se busca sacar ventaja del Azteca”, comenta el experto. Aun así, insiste en que el Azteca mantiene un valor histórico y emocional que no debe descartarse.
Una estrategia para minimizar efectos
Una de las propuestas más interesantes del especialista es que los jugadores procedentes de Europa se hospeden en Cuernavaca, a menos de una hora de la capital y con menor altitud, para reducir el llamado “golpe de altura”.
El objetivo sería llegar a la Ciudad de México solamente el día del partido, comer, descansar y jugar, evitando las horas en las que la altura empieza a generar efectos negativos.
Según Ipata, aunque el músculo tiene memoria fisiológica en términos cardiovasculares y metabólicos, quienes crecieron y entrenaron originalmente en la altura mantienen cierta ventaja biológica sobre quienes nunca lo hicieron. Aun así, recuerda que el rendimiento no solo depende del cuerpo, sino también del tiempo de adaptación que permite cada convocatoria.
Dilema para los entrenadores en fechas FIFA
En eliminatorias mundialistas, los entrenadores suelen exigir que los jugadores se integren por lo menos cinco días antes del partido para trabajar táctica, cohesión y sistemas de juego. Bajo esa lógica, lo más conveniente sería concentrar al equipo en una ciudad por debajo de los mil metros, como Cuernavaca, sin perder cercanía con el Estadio Azteca.
Experiencia comparada: el caso Bolivia
El texto recuerda las enseñanzas del profesor Vaca (QEPD), expreparador físico de Bolivia, quien aseguraba que incluso los jugadores que militaban fuera del país mantenían una adaptación natural a la altura de La Paz (3,625 metros) gracias a su historial formativo. Sin embargo, también advertía que la altura no garantiza resultados: Bolivia no va a un Mundial desde 1994, a pesar de su localía.
¿Realmente influye el Azteca o es un problema futbolístico?
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Más allá de la altitud, el análisis apunta a que el verdadero factor a evaluar es la calidad actual de los futbolistas, su nivel futbolístico y el posible desgaste de quienes llegan del extranjero. Antes de pensar en mudar al Tri, sería prudente revisar si los foráneos deberían o no ser titulares, dependiendo de su estado de forma.
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