Raúl Alpízar, separado de Pumas por presunta corrupción
El director de fuerzas básicas, supuestamente, cobraba a padres de familia por darle continuidad a sus hijos en los equipos juveniles auriazules
Raúl Alpizar fue separado de su cargo como director de fuerzas basicas de Pumas de la UNAM después de las supuestas denuncias realizadas por padres de algunos jugadores que lo acusan de solicitar dinero a cambio de darle continuidad a sus hijos.
Este jueves, el periódico Reforma publicó una nota, basada en capturas de conversaciones realizadas por WhatsApp, donde exhibe los supuestos cobros que Alpízar, junto a Esteban González, visor del club, realizaban a padres de jugadores prometiendo darle continuidad en los equipos de fuerzas básicas del club universitario.
Ante la publicación, Pumas emitió un comunicado en el que informó que tanto Alpízar como González fueron separados del cargo mientras se realiza una investigación para comprobar su responsabilidad en los hechos denunciados.
“Con relación a la información publicada en el Diario Reforma en su edición de este miércoles 14 de septiembre, donde se señalan presuntos actos de corrupción por parte del director de fuerzas básicas Raúl Alpízar y del visor Esteban Alberto González, a padres de familia, se informa lo siguiente: Para el Club Universidad Nacional, estos señalamientos son de gravedad, pues atentan contra el espíritu universitario y los valores de nuestra institución.
Por ello, la directiva ha determinado separar temporalmente del cargo y funciones a Raúl Alpízar, como director de fuerzas básicas, y al visor Esteban Alberto González, ambos sin goce de sueldo, para realizar una investigación interna exhaustiva sobre el caso. Ante esta situación, el vicepresidente deportivo Miguel Mejía Barón se hará cargo de las fuerzas básicas de Pumas, mediante su auxiliar Jorge Vantolrá”, se lee.
El club del Pedregal advirtió que, de hallar culpables a Alpízar y González, tomará acciones legales en su contra.
“Después de la investigación, se deslindarán responsabilidades y si se comprueba cualquier anomalía se actuará hasta las últimas consecuencias de manera legal contra quienes resulten responsables. El Club Universidad Nacional nunca permitirá que ningún miembro de la institución realice acciones que perjudiquen la integridad de ningún jugador y mucho menos que exista abuso de confianza de cualquier tipo con padres o madres de familia de nuestros futbolistas.La familia es el pilar más importante en la formación de un futbolista y sería en contra de nuestros principios realizar cualquier hecho que la perjudique; al contrario, la prioridad siempre es estar cerca de la familia de los jugadores, de escuchar sus inquietudes y trabajar juntos para formar, además de futbolistas profesionales, a personas de bien para nuestra sociedad, acorde al espíritu universitario y los valores de nuestra institución”, concluye.