Monterrey eliminó a Cincinnati de Concachampios

Los Rayados hicieron lo suyo y vencieron 2-1 (3-1 global) a un cuadro de Cincinatti que vendió cara la derrota para avanzar a los cuartos de final de la Concacaf Champions Cup, donde ya esperan a Lionel Messi y compañía.

La “Pandilla” inició con el plan de liquidar la serie pero la falta de puntería evitó el cometido apenas al 5′ en la cabeza de Brandon Vázquez. El ariete albiazul mando por un lado su remate ante la incredulidad de sus compañeros y afición.

Pese a ellos los pupilos de Pat Noonan no bajaron los brazos y con tranquilidad comenzaron a crear daño en la meta de Esteban Andrada; siendo Corey Baird quien quedó a nada de abrir los cartones a pase de Luciano Acosta al 11′.

El arquero rayado salió en plan grande y al 28′ detuvo la ventaja estadounidense tras tapar el trallazo de Acosta, quien fue un verdadero demonio para la escuadra local.

La plantilla norteña se acordó de su juego y previo al descanso rompieron el cero en los cartones vía Luis Romo. El mediocampista definió de manera excelsa (taquito) un tiro centro de Maximiliano Meza, provocando la algarabía en el BBVA y aumentar la ventana en el global a dos goles.

Ya en el complemento las cosas cambiaron radicalmente para los dirigidos por Fernando Ortiz, quienes en el amanecer del lapso se vieron empatados con un tremendo golazo de Acosta. El ‘10′ argentino hizo la de “crack”, quitándose a cuanto hombre pudo entrando al área, definir el 1-1 y poner suspenso en el juego.

De forma instantánea, el equipo de blanco puso en serios aprietos a los regios pero Andrada bajo los tres postes se lució con una doble atajada, primero a una mano al cañonazo de Aarón Boupendza y posteriormente un cabezazo de Baird mandando a córner.

El asunto parecía nublarse en los locales pero la luz llegó con el tanto de Vázquez al 67′. El famoso “Superman” actuó tal cual su apodo, salvando a su plantilla con un pase a la red ante la descolgada comandada por Meza, dándole la calma necesaria tras una serie de complicaciones.

Con el duelo totalmente abierto, los visitantes intentaron responder pero rompiste le negó la paridad a Boupendza, quien estaba haciendo una obra maestra con su remate de tijera al 75′.

Las emociones estuvieron a tope pero el reloj llegó a su final, dejando a los mexicanos con el boleto a la próxima ronda en donde medirán fuerzas con el poderoso Inter de Miami de Lionel Messi y compañía, llave que se cerrará en la Sultana del Norte a inicio de abril.