Pacman Jones al policía que lo arrestó: “Espero que te mueras”

Trufado de perlas de todo tipo. Así es el video que TMZ publicó el lunes y en el que Adam “Pacman” Jones dedica un generoso surtido de lindezas al agente de policía que le detuvo: “Espero que te mueras”, varios escupitajos postreros y algunos requerimientos verderones al funcionario, de fácil traducción y bastante más difícil publicación.

¿Pero realmente la noticia es la grabación en sí, que deja poco lugar a dudas y certifica que Pacman probablemente no asistió a las mejores escuelas de su vecindad? Quizás lo sean más las consecuencias. Desde el asiento trasero del coche patrulla, y sin saberlo, el cornerback podría haber estado firmado la liquidación de su contrato con los Bengals. Abriendo las puertas de par en par a la posibilidad de haber jugado su último partido en el estadio Paul Brown como local.

La realidad es que nuestro protagonista cumplirá 34 años el 30 de Septiembre y su contrato le garantiza $6,300,000 como salario base, amén de otros potenciales incentivos. Aun cuando Jones ha sido titular indiscutible en los Bengals este año, dada su edad y el acomodo que supondría para el salary cap de los de la AFC Norte, cortarle se antoja una golosa posibilidad en poder de Cincinnati.

Es obligado recordar que Pacman tiene un amplio historial de problemas con la ley. Es reincidente, lo que podría acarrear sanciones de varios partidos por parte de la propia NFL, ávida siempre de aplicar su espada de la justicia con determinados comportamientos.

Probablemente conscientes de ello, sus letrados han emitido un comunicado en el que afirman lo avergonzado que Jones se halla. Los Bengals también han emitido el suyo, en el que corroboran estar “extremadamente decepcionados” con su CB. Un sensible cambio de actitud, teniendo en cuenta que no realizaron comentario alguno cuando se produjo la detención.

Qué venenosa ironía: “Te vas a quedar sin trabajo”, profetiza Pacman al agente de policía. Habrá que esperar acontecimientos, pero hay veces en la vida que, definitivamente, uno sólo puede empeorar las cosas por no guardar silencio.